Quien es Diego Osorio Vélez?
Toda su vida ha
transcurrido en el Departamento de Caldas, aunque es Risaraldense de nacimiento.
Se ha dedicado a múltiples actividades laborales de campo y académicas sin abandonar su actividad como agricultor,
que ejerce desde la década de 1980. Es egresado de la Fundación Manuel Mejía, Programador
de Computadores, Ingeniero Agrónomo, con algunos estudios de post grado; ha
sido instructor del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), fue Agrónomo Extensionista de la Federación
Nacional de Cafeteros de Colombia, asesor técnico comercial en varias compañías
nacionales, Consultor de Desarrollo en
la empresa EcoFlora Agro. Conferencista, docente catedrático en la Corporación
Universitaria Santa Rosa de Cabal. Ha
dedicado gran parte de su tiempo, desde el año 2002, a la laboriosa tarea de
concientización de empresarios, agricultores y jóvenes sobre el problema
ambiental causado por la actividad humana.
Desde agosto de 2002, con iniciativa propia y apoyado por consumidores
conscientes (clientes), ha trabajado arduamente para encontrar verdaderas y
urgentes soluciones para afrontar el complejo problema ambiental y de
calentamiento global; se ha enfocado en la validación de tecnologías
para la producción agroecológica y en el desarrollo de nuevas técnicas en campo para la recuperación
del medio productivo rural enfocado en cultivos comerciales de tomate de aliño
(Solanum lycopersicum ), la especie hortícola que ha causado la mayor
destrucción y contaminación de las zonas agrícolas colombianas. Su convicción sobre la necesidad de retornar
a la producción natural y su laboriosidad ha dado frutos desde el año 2002,
pues ha suministrado alimentos sanos y nutritivos a más de 300 familias en
ciudades como Manizales, Pereira, Armenia, Belén de Umbría, Filadelfia, Santa
Rosa de Cabal. Su dedicación por ofrecer verdadera alimentación a la sociedad
del eje cafetero, la búsqueda de la recuperación del medio ambiente y la
equidad para los agricultores, le hicieron acreedor al reconocimiento como Egresado Meritorio de la Universidad de
Caldas en la orden Humberto Gallego Gamboa en el año 2011.
Toda su vida ha
transcurrido en el Departamento de Caldas, aunque es Risaraldense de nacimiento.
Se ha dedicado a múltiples actividades laborales de campo y académicas sin abandonar su actividad como agricultor,
que ejerce desde la década de 1980. Es egresado de la Fundación Manuel Mejía, Programador
de Computadores, Ingeniero Agrónomo, con algunos estudios de post grado; ha
sido instructor del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), fue Agrónomo Extensionista de la Federación
Nacional de Cafeteros de Colombia, asesor técnico comercial en varias compañías
nacionales, Consultor de Desarrollo en
la empresa EcoFlora Agro. Conferencista, docente catedrático en la Corporación
Universitaria Santa Rosa de Cabal. Ha
dedicado gran parte de su tiempo, desde el año 2002, a la laboriosa tarea de
concientización de empresarios, agricultores y jóvenes sobre el problema
ambiental causado por la actividad humana.
Desde agosto de 2002, con iniciativa propia y apoyado por consumidores
conscientes (clientes), ha trabajado arduamente para encontrar verdaderas y
urgentes soluciones para afrontar el complejo problema ambiental y de
calentamiento global; se ha enfocado en la validación de tecnologías
para la producción agroecológica y en el desarrollo de nuevas técnicas en campo para la recuperación
del medio productivo rural enfocado en cultivos comerciales de tomate de aliño
(Solanum lycopersicum ), la especie hortícola que ha causado la mayor
destrucción y contaminación de las zonas agrícolas colombianas. Su convicción sobre la necesidad de retornar
a la producción natural y su laboriosidad ha dado frutos desde el año 2002,
pues ha suministrado alimentos sanos y nutritivos a más de 300 familias en
ciudades como Manizales, Pereira, Armenia, Belén de Umbría, Filadelfia, Santa
Rosa de Cabal. Su dedicación por ofrecer verdadera alimentación a la sociedad
del eje cafetero, la búsqueda de la recuperación del medio ambiente y la
equidad para los agricultores, le hicieron acreedor al reconocimiento como Egresado Meritorio de la Universidad de
Caldas en la orden Humberto Gallego Gamboa en el año 2011.
Quien es EL REY SANO?
Es un tomate de aliño producido
sin sustancias tóxicas como herbicidas, nematicidas, insecticidas, fungicidas y fertilizantes de síntesis
química; sin plásticos, ni fibras sintéticas, logro obtenido después de 35 años
de experiencia en la producción de esta hortaliza y 17 años de investigación
técnica en campo para ofrecer un producto inocuo y rico en biocompuestos,
(nutritivo y sano); así mismo este proceso aporta conocimiento dirigido a la recuperación del
medio productivo y la biodiversidad demostrando que la producción agroecológica
si es posible.
En la actualidad, el tomate de
aliño es uno de los cultivos más contaminados cuyo consumo puede causar imperceptibles trastornos en la salud. Este
cultivo es muy susceptible al ataque de insectos y enfermedades, lo que ha llevado
al uso excesivo de sustancias nocivas por parte de los agricultores para su
control causando diversos efectos negativos de desequilibrio, iatrogénicos y por
lo general desconocidos en el sistema natural, afectan la salud de los seres
humanos, contaminan el suelo, el agua, el aire y los animales; tal problemática
se causa por la falta de conocimiento sobre las relaciones coligativas de los
elementos, la coevolución, la función, relación – EXIGENCIA COLIGATIVA- del
suelo con las plantas, la bioindicación de las arvenses y dinámica poblacional
de insectos fitófagos y benéficos. En
otro sentido, puede concluirse que el caos y la destrucción actual, es el
resultado de la planeación y ejecución
de proyectos sin tener en cuenta el sistema natural que rige todos procesos de
la vida, auspiciado por un errado plan mundial de producción de alimentos a
bajo costo, de alto rendimiento pero con una elevada tasa de uso de diversas
sustancia pesticidas que no dieron solución al problema del hambre en el
planeta… Así entonces cabe preguntarse ¿Dónde están las soluciones?
La producción ecológica de esta
hortaliza durante 17 años ayudará a la sensibilización de la sociedad para que el ser humano retorne
a este sistema de producción, ya que fue, y es la manera más acertada de
mitigar los efectos detrimentales del medio natural causados por las explotaciones
agropecuarias. Es hora que el ser humano
aporte verdaderas soluciones al problema ambiental.
Es un tomate de aliño producido
sin sustancias tóxicas como herbicidas, nematicidas, insecticidas, fungicidas y fertilizantes de síntesis
química; sin plásticos, ni fibras sintéticas, logro obtenido después de 35 años
de experiencia en la producción de esta hortaliza y 17 años de investigación
técnica en campo para ofrecer un producto inocuo y rico en biocompuestos,
(nutritivo y sano); así mismo este proceso aporta conocimiento dirigido a la recuperación del
medio productivo y la biodiversidad demostrando que la producción agroecológica
si es posible.
En la actualidad, el tomate de
aliño es uno de los cultivos más contaminados cuyo consumo puede causar imperceptibles trastornos en la salud. Este
cultivo es muy susceptible al ataque de insectos y enfermedades, lo que ha llevado
al uso excesivo de sustancias nocivas por parte de los agricultores para su
control causando diversos efectos negativos de desequilibrio, iatrogénicos y por
lo general desconocidos en el sistema natural, afectan la salud de los seres
humanos, contaminan el suelo, el agua, el aire y los animales; tal problemática
se causa por la falta de conocimiento sobre las relaciones coligativas de los
elementos, la coevolución, la función, relación – EXIGENCIA COLIGATIVA- del
suelo con las plantas, la bioindicación de las arvenses y dinámica poblacional
de insectos fitófagos y benéficos. En
otro sentido, puede concluirse que el caos y la destrucción actual, es el
resultado de la planeación y ejecución
de proyectos sin tener en cuenta el sistema natural que rige todos procesos de
la vida, auspiciado por un errado plan mundial de producción de alimentos a
bajo costo, de alto rendimiento pero con una elevada tasa de uso de diversas
sustancia pesticidas que no dieron solución al problema del hambre en el
planeta… Así entonces cabe preguntarse ¿Dónde están las soluciones?
La producción ecológica de esta
hortaliza durante 17 años ayudará a la sensibilización de la sociedad para que el ser humano retorne
a este sistema de producción, ya que fue, y es la manera más acertada de
mitigar los efectos detrimentales del medio natural causados por las explotaciones
agropecuarias. Es hora que el ser humano
aporte verdaderas soluciones al problema ambiental.
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